miércoles, 29 de abril de 2009

Ese chispazo...

Excuse me...










Llego a casa...con el estado neuronal agotado, y pienso acerca de lo injusto que es el mundo, en la moda que hay con la peste porcina, en lo desangelados que están los niños de África, y en lo mucho, mucho que me jode el SIDA...

Luego están aquellos, a los que se les deforman las extremidades porque pareciera que el mundo se les hace pequeño, aquellos en los que las ideas les juegan una mala pasada, los otros que se fueron con mi abuelo, y aquellas ratas que putearon a base de bien en el experimento número 10.

Suerte, que en lo que llevamos de años (exactamente tres) he aprendido a ver, que ni los niños andan tan jodidos, y que las neuronas a lo mejor no se mueren tanto.
Suerte, que me enseñaron a ver el potencial talento que tenemos, a pesar de perderlo con la mitad de nuestros actos reflejos, convirtiéndonos en un estado de larva asquerosa que ha perdido el sentido en la metamorfosis...

Y como la neurobiología se me da fatal, no puedo evitar hacer chispazo, que no sinapsis, cada vez que pienso en lo mal que lo paso con la impotencia de mis cuerdas vocales y en la escasa importancia que eso tiene cuando mi cuello aún gira 97º para poder seguir observando lo jodidos que están los niños de África, lo puta que es la malaria, y lo mal que me llevo con las enfermedades autoinmunes...


















En nuestro afán egocéntrico olvidamos aquel día,
que lo que a nosotros simplemente nos pone nerviosos...
...a ellos les mata...








Semana de nervios...y voces...pero realmente...de examen de conciencia


6 comentarios:

eliú dijo...

esa es la puta realidad.
nos quejamos de tantas cosas, pero volteamos 97grados para saber que somos eso mismo: egocentricos.

Tony Amesty dijo...

Tremenda y cruda reflexión..de lo cruel y absurdo del ser humano.

Un abrazo

Quejio dijo...

Buenas ...

Me sumo a los dos vecinos de aquí arriba.

Es tremendo el segundo con el que gira la vida. A unas vida, y a otros esquina.

Abrazo lunático.

Borja Echeverría Echeverría dijo...

Quisiera que mi voz fuera tan fuerte
que a veces retumbaran las montañas
y escuchárais las mentes-social-adormecidas las palabras de amor de mi garganta.

En fin ya lo decía Extremoduro hay que concienciar, despertar a la gente y que vea los problemas que de verdad hay en el mundo.

Posdata: me ha gustado mucho lo de los gatos en la cabeza.

Saludos.

Anónimo dijo...

Bueno.. no nos va tan mal.
Buen vuelo

Café con Agua dijo...

Esas refelxiones son pequeñas lecciones de vida... y tu sensibilidad un ejemplo a seguir.

Besazos wapa!